El cofundador de Green Salon Collective, Fry Taylor,  demuestra cómo se usa el cabello recolectado por peluqueros para limpiar los vertidos de petróleo, el 28 de junio de 2021 en Londres
El cofundador de Green Salon Collective, Fry Taylor, demuestra cómo se usa el cabello recolectado por peluqueros para limpiar los vertidos de petróleo, el 28 de junio de 2021 en Londres Tolga Akmen AFP

Un colectivo ecologista anima a las peluquerías del Reino Unido a reciclar el cabello para salvar el planeta, utilizándolo para limpiar las mareas negras, hacer abono o producir energía

En un salón del Reino Unido, se dispone a demostrar cómo utilizar el pelo cortado para fabricar filtros anticontaminación.

Vierte agua en un depósito y añade aceite de motor. Luego rellena una larga red de algodón con cabellos, que desliza después sobre la superficie del agua contaminada.

Unos segundos después, esta vuelve a estar limpia.

"El pelo absorbe naturalmente el aceite y lo retiene".


Según los expertos, un kilo de cabello absorbe hasta 8 litros de petróleo. La idea de utilizar el pelo como filtro para limpiar la contaminación procede de Estados Unidos y se ha probado en todo el mundo para absorber los hidrocarburos en el mar, como en el caso de la marea negra provocada por el hundimiento de un petrolero japonés frente a la isla Mauricio en 2020.

"En España no existe la infraestructura para reciclar estos residuos".

El 99% del cabello cortado, se envía a los vertederos.

"En la actualidad, unos 50.000 salones y 170.000 peluqueros independientes están enviando cantidades ingentes de pelos a los vertederos".

"Creo que la sostenibilidad es algo que falta en las peluquerías y que es fácil de integrar en nuestras operaciones diarias".

- "Superalimento" para la tierra -


Otro uso ecológico del cabello es el compostaje. El pelo es rico en nitrógeno, por lo que es un complemento ideal para el abono.

Ryan Crawford, propietario de un salón en Milton Keynes, 80 km al norte de Londres, experimenta con las verduras en su jardín.

En un día soleado de julio, muestra dos brotes jóvenes de col: uno, rodeado de pelo, está intacto y el otro, plantado sin pelo, está carcomido.

"El cabello forma una barrera protectora alrededor de la base de los brotes, manteniendo a raya a babosas y caracoles", explica Ryan, que también coloca pelo directamente en el suelo para retener la humedad. Es "un superalimento para la tierra".

En un año, 600 salones del Reino Unido e Irlanda se unieron al colectivo, que recogió unos 500 kilos de pelo.

Se utilizaron para limpiar un vertido de petróleo en Irlanda del Norte en mayo y para las vías fluviales y el compostaje.


Ahora espera exportar el modelo a gran escala en España.